Advertencia~

Por Fernanda Zamora:

¡No te acerques, Alma Inocente al santuario donde reposa este vil corazón!No te acerques guiado por el fulgor de sus cabellos ni por el aroma a su perfume a flores de limón.No, no lo hagas, Alma Inocente, que podrás encontrarte con las hiedras que rodean sus aras y le preservan intacto entre largas espinas hechas de duro sarcasmo...Solo hay una sola forma conocida (hasta ahora) de acercársele y es con malvada estrategia y cruel embuste.¡Oh, poder de dominio que Ella tiene sobre ti! Lo rechaza, no lo quiere, te tira por ahí.¡Cuidado, Alma Inocente! un ataque directo hará que ella te doblegue el ego ante tal respuesta ya que inclinando la cabeza se marchará por donde vino dejando fría vuestra candida esencia.

Tampoco escales los escarpados riscos de sus comentarios… Tú mismo lo haz dicho: es analítica, pero ahora es parte de Ella, inconciente y lejos de su control, la que te habla:Alma Inocente, soy santuario buscado, muchas veces rechazado y en ocasiones hasta solitario… taciturno o lúgubre, pero luminoso y emocionado. Si querer entrar aquí es lo que te trae hoy ante el lumbral de la puerta, solo una cosa te pido: llena ‘amor’ lo que alguna vez fue olvido.Alma Inocente, se cruel y despiadado… haz que arañe las paredes gritando con agonía tu nombre, envolved sus ojos con vuestro velo y dejadla ciega para que cuya única guía sea tu estrella.

Demuestra conocimiento de cualquier materia al viento recitada… se amante misterioso ¡multifacético! para que este santuario marchito jamás deje de a ti de buscar… ¡Develad los misterios de su mente! Las palabras inconexas… los contextos dislocados de los rincones maravillosos y de sus recovecos irreflexivos.Alma Inocente que atraviesas los lejanos territorios de tu vida y que con seguridad arrancas notas de la campana en el dintel colocada…. No seas ni altanero ni echado a menos, no demuestres interés y cederé…¡No te ilusiones, Alma Inocente! ¡No, no cometas semejante desvarío!… no es poder sobre ti lo que busco, solo quiero que sepas quien soy, que tengas en cuenta que aquí habita un vil corazón que hasta ahora ha demostrado no ser merecedor de ofrenda alguna… meditad sobre esto al momento de proseguir con tu empresa….

Si das pie atrás, no olvides la amistad… si decides que la puerta no es suficientemente ancha para salir por ella, quédate, mas no interrumpiré tus cavilaciones: son mil voces las tuyas y con las mías ya son mil más… ¡que el silencio provoque raciocinio frío y sentimientos analizados! ¡que vuestra cabeza fluya en paz a través del manantial de tus pensamientos!… mas, no dejes que el santuario se contamine con ellos, recuerda que ella también juzgara tus acciones.¡Por favor! No hagas el inútil intento de inmolarte… curad tus heridas si es que las hay y marchaos para no volver o para volver… pero no entrar ¡No te vendas a los comerciantes! No uses palabras envenenadas expuestas como suculentas y empalagosas golosinas… tened en claro que al santuario le gusta lo agridulce…
Este es mi consejo Alma Inocente: si eres lo suficientemente valiente para resistir el embate del dolor que destila el rechazo, entra a este páramo de tierras yermas. Si eres paciente, cultiva en el tu sustento ya que pronto te dará magnifica recompensa… si eres de aquellos que con naturaleza divina han sido bendecidos con los ojos a los que la pitonisa no se resiste ¡miradme! Que pronto se erigirán ante ellos altar sagrado de deseo, pasión y desenfreno… ella levantará estandartes y prendera velas, hará señales y extenderá por todas partes focos de luminosa devoción… pero… sobre todas las cosas recuerda tú, Alma Inocente, que sé que sabrás como hacerme adicta a tu persona si le das tiempo al tiempo… y si obras con sabiduría poniendo el cerebro antes que cualquier otra prenda como garantía…